Casi de la nada
quiso alunizarse
en un zoquete mojado.
Disgracias de verdulero
le pasaron,
lo mancaron casi todo,
con foto en primera plana
(y todo)
al final lo abotonaron
imprimiéndole en la frente
POR AVION.
Nariz picuda le decian
y se aparecía la lechuza
por robarse la lechuga con hortal.
Disgracias de verdulero
lo aturdian
se le murió la mujer y el padre.
La suegra se le quedo a vivir
en la propia pieza,
con derecho a convivencia
La vieja sin casa
se pedorreaba,
adicta al repollo
se pedorreaba.
Le mufaba las novias nuevas
con su acida presencia,
por mas que aireaba y aireaba
la vieja se pedorreaba.
Sin respeto del viudo
se pedorreaba.
Sin respeto a la muerta
que dormía envalijada,
la vieja pasaba lento
y un sonido evidenciaba
que sin causal ni fomento
la suegra se pedorreaba.
(continuará)
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Y en el fermento de la vieja
Como un sillón abandonado
Se deshacía con los días, con las lluvias, con los roces de este lado del sueño
Que ni sombra daba de tan podrido que lo tenía
Y podrido por podrido
Las zanangorias y lo pomelos se le pudrieron
Se le pudrió la papa, la palta y la batata
El tomate, la cebolla y las lechugas
Se le pudrieron
Cítricos, bananos y hortalizas
Jengibre, duraznos y hasta una sandía (rayada, calada, colorá)
Pudriéndose
Y la vieja
Se pedorreaba.
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